Existen muchos tipos de revoluciones: internas, externas, pacificas y violentas. Desde que el ser humano tuvo conciencia de si mismo comenzò la busqueda de cambios que provocarian marcadas consecuencias, sean estas buenas o malas (depende del ojo con que se vean).
Nombres que provocaron revoluciones son muchos: Gandhi, Luter King, Lutero, Fidel, Che guevara, Jesus Entre muchisimos màs que quizà ni siquiera se encuentra en el pensamiento colectivo de la Sociedad.
Son ademàs de diversa indole, politico, economico, religioso, de gènero, sexual, etc.
Cada uno puede ser un generador de revoluciòn si pensamos que nuestros ideales son para un bien de muchas personas (toda revoluciòn comenzò de un ideal) asi que en nuestro Trabajo, Escuela, Iglesia, Barrio, etc. Puede ser la tierra fertil para trabajar para un mundo mejor. No es necesario una utopia para sacudir cimientos, solo valor y fuerza de convicciòn.
Nuestro maestro Jesùs fuè en contra de las costumbres de su epoca, no respetò las leyes pues vino a convencer de que estas mismas estaban manejando el sentido de ser comunidad olvidandose de la cercania con Dios. Los Fariseos y Saduceos sabian muy bien que podian manipular a las personas y sacar bienes en todo sentido, pero Jesus los parò en seco y al buen chileno "los dejo como chaleco de mono". Hoy las ensenanzas de Jesus estàn por doquier y los verdaderos seguidores continuan sembrando justicia con equidad para formar el reino en el aqui y el ahora.
La revolucion sexual comenzò desde varios aspectos o puntos de referencia, las mujeres marcaron la pauta y aùn continuan defendiendo lo que es justo, los derechos sexuales y reproductivos son un tabù dentro de las Iglesias por que muchas van en contra de las doctrinas eclesiales, los homosexuales van al frente de muchas reivindicaciones y las nuevas teorias sexuales salen a la luz.
Cada cual puede ser un revolucionario dentro de su ambiente, cada uno tiene mucho que decir, cada uno puede cambiar el mundo a diario. Pero antes de querer empezar nuestro camino que muchas veces se vuelve complicado y con barreras, debemos mirar dentro de nosotros, analizarnos y observar detenidamente, pues cada dia dentro de nosotros se forman revoluciones. Nuestro corazòn nos habla cada dia y nos impulsa a movernos. Hay veces que no escuchamos y hacemos lo que parece correcto, la invitacion es a detenerse un momento antes de nuestra marcha revolucionaria y miremos dentro de nosotros pues nuestro corazòn nos habla, es aquella energia que nos impulsa la que nos hace ser libres y con coraje de lucha, ese sentimiento revolucionario es Dios que nos invita a cambiar nuestro mundo.
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